Reflexión de una mujer madre, feminista, trabajadora, teletrabajadorea y “artista”: en definitiva, una mujer cualquiera.
Desde el 15 de marzo empezó para los Españoles el estado de confinamiento, claro no para todos igual, con eso me refiero a que comenzó el confinamiento para más cantidad de Españolas que Españoles.
Algo “muy normalizado” por qué si alguien debe hacer teletrabajo es mejor que sea la “mujer”, así de esa manera puede hacer de profesora, de cocinera sana, de limpiadora, de lavandera, de monitora de ocio y tiempo libre, de repostera (con clases prácticas incluidas para niños), monitora de educación física y de yoga- meditación, cuentacuentos, de estilista para vestirnos y peinarnos como si de un paseo se tratara.
Como si de un soldado del gobierno se tratara atendiendo a las mil y una recomendaciones que nos colapsan por medio de los medios de comunicación. Hasta de filtro informativo de los grupos de WhatsApp, de hacer que tu familia a las 20:00 de la tarde se venga arriba para salir aplaudir como si fuera el primer día desde tu balcón, o incluso de llamar a familiares y amigos para que sepan que te acuerdas de ellos, y que cuenten contigo para hacerles más ameno el día…..
Mujeres del mundo: cuando esto acabe tenemos que volver a replantearnos los temas e igualdad con una buena copa de vino.